Mark Ryden nació en 1963 en Medford, Oregón, pero se crió en California. Allí, en Pasadena, cursó sus estudios de arte recibiendo su BFA (Bachelor of Fine Arts) del Art Center College of Design en 1987.
Sus primeros trabajos se dieron en el terreno de la ilustración, adquiriendo un notable reconocimiento en la década de los 90 al diseñar las portadas de los discos de grupos como Aerosmith (Love in an Elevator), Red Hot Chilli Peppers (One Hot Minute) o el famosísimo Dangerous de Michael Jackson. Gracias a estos trabajos su obra llegaría a manos de Robert Williams, quien en 1994 colocaría a Ryden en la portada de la revista Juxtapoz, dedicada al llamado “lowbrow art” (movimiento artístico underground que surgió en California en la década de los 70) y el segundo magazine más vendido en los Estados Unidos.
El primer solo show de Mark Ryden tuvo lugar en la propia Pasadena en 1998, llamado “The Meat Show” (El show de la carne). Como su propio nombre indica, las obras que allí se mostraron tenían como elemento principal, la carne. En esta exposición Ryden utiliza este recurso para explorar la contrariedad del ser humano, utilizando la carne como un elemento de consumo, sin reparar en que antes ésta formaba parte de un ser vivo. La sangre y el despiece son inherentes a la industria cárnica, pero sin embargo es algo desagradable y en lo que el consumidor, simplemente, prefiere no pensar.
El trabajo de Mark Ryden está plagado de elementos simbólicos. La carne es uno de ellos, pero también hay muchos más: abejas, conejos, cabezas desmesuradamente grandes o Abraham Lincoln. Algunos de estos recursos los utiliza bien por su forma o por su estética. Por ejemplo, los conejos se asocian con la ternura, pero Ryden congela las expresiones de estos animalitos transformándolos en figuras siniestras. Por otro lado, Ryden convierte la figura de Abraham Lincoln en un icono de tal forma que nos olvidamos de la persona y el personaje. Lo mismo ocurre con el Coronel Sanders (creador de la cadena Kentucky Fried Chicken). La fascinación que siente el artista por estos personajes históricos, hechos a sí mismos, queda plasmada en sus trabajos de forma recurrente.
La obra de Mark Ryden se catalogó en su día dentro del “Surrealismo Pop”. Ryden recoge figuras, objetos y personajes propios de la cultura actual y aunque sus pinturas parezcan propias del surrealismo, el artista desmonta la definición de este estilo al escoger deliberadamente cada uno de los elementos que intervienen en sus trabajos.