Este artista, de origen Canadiense, afincado en Reino Unido es un artista conceptual creador de una de las imágenes más icónicas del siglo XXI: Lightness of Being. Se trata de un sensacional retrato de Su Majestad la Reina Isabel II en el cual podemos ver a la mujer más famosa del mundo en un estado meditativo. La luz y la quietud realzan la imagen de la Reina que evoca la espiritualidad y humanidad más íntima del personaje.
La obra de Chris Levine se centra en el manejo de la luz, el tiempo y el espacio, elementos con los que el artista trata de que su audiencia tenga una experiencia en lugar de ser meros espectadores. Aunque gran parte de su trabajo está formado por instalaciones y puestas en escena que incluyen láseres y grandes soportes, sus retratos fotográficos son los que le han otorgado un reconocimiento internacional.
Su serie Equanimity de 2004 en la que retrató a la Reina desde múltiples ángulos y de la cual salió (casi por casualidad) Lightness of Being, es un punto de inflexión en su carrera. Su portfolio incluye otros retratos en los que figuran británicos de renombre como Kate Moss, Gracie Jones, Naomi Campbell, Paul Smith o el mismísimo Banksy. Su trabajo Compassion, en el cual Levine retrató al Dalai Lama en 2015, fue un sueño cumplido: "La práctica de la meditación es fundamental para mi modo de vida y para mi práctica como artista" - Chris Levine.
El trabajo de Levine fusiona distintos campos como la moda, el diseño, la música, la instalación o la performance, lo que le ha llevado a realizar colaboraciones con distintos artistas como Antony and the Johnsons, Philip Treacy, Massive Attack o Grace Jones.
Levine estudió en la Chelsea School of Art (actual Chelsea College of Arts) antes de obtener un máster en infografía en la Central Saint Martins. Ha expuesto en Londres, Nueva York, Los Ángeles y Milán. Su obra se ha vendido por seis cifras en el mercado secundario.
"Siempre he buscado crear arte que lleve al espectador a la quietud y a un estado expansivo meditativo. Cuanto más se puede acceder a la obra a través del corazón y sin necesidad de procesarla mentalmente, se permite una experiencia sensorial más profunda y se produce algo que nos conmueve emocionalmente con un impacto positivo en nuestro estado fisiológico." - Chris Levine.