Muchos son los personajes que conforman el universo de Takashi Murakami pero sin duda, son tres los que tienen más protagonismo. Mr. DOB, Kaikai y Kiki son para Murakami una fuente de inspiración cuyo significado va más allá de lo estético. Estos personajes son fruto de las ideas, los razonamientos y los sentimientos de su creador, que se conjugan con la cultura japonesa y la sociedad de consumo más actual.
En cada trabajo de Takashi Murakami encontramos, a primera vista, una imagen que se caracteriza por ser bella, colorida y muy alegre. Desde el desconocimiento, como tan a menudo ocurre en el mundo del arte, es fácil clasificar la obra de este artista japonés como simple, naif o incluso frívola. Nada más lejos de la realidad. Según nos vamos sumergiendo en el mundo creado por Murakami, encontramos múltiples simbolismos que abruman por su complejidad. A decir verdad, es posible que cada trabajo de Takashi Murakami encarne la misma complejidad teórica que su proceso creativo. Pero de eso ya hablaremos en otro momento.
Las calaveras, las flores o las setas componen una flora y un entorno para crear una historia. Mr. DOB, Kaikai, Kiki, el propio Takashi Murakami o incluso su perro Pom son los verdaderos protagonistas.
A medida que el espectador adquiere más conocimientos sobre el trabajo de este artista, no puede sino asombrarse del bagaje cultural que éste posee. Takashi Murakami no es sólo un gran artista, sino también un gran conocedor de su cultura, su historia y gran estudioso de diversos temas como la historia de la pintura o la historia de las religiones. Si a este fondo tan cultivado le añadimos la inmensa curiosidad del artista por la sociedad actual, obtenemos el famoso “superflat”. Un estilo propio que conjuga todos estos elementos y el estandarte del trabajo de Murakami.
Conociendo a Mr.DOB
Se dice que Mr. DOB es el alter ego de Takashi Murakami. Su figura se ha repetido en multitud de trabajos y en ellos aparece con distintas formas y en distinto número. Mr. DOB puede tener la apariencia más inocente e infantil en unas obras y en otras mostrarse como un ser deforme, desgarrado y malvado. El número y sus metamorfosis forman parte de este show intelectual que Takashi Murakami nos tiene preparado.
Pero ¿qué significa Mr. DOB? Pues podríamos traducirlo como “Mr. Preguntas”. DOB es el acrónimo de “dobojite, dobojite” una frase dada creada por Murakami que significa en japonés coloquial “¿por qué? ¿por qué?”. Éste es el concepto clave de Mr. DOB, un ser que se cuestiona su entorno constantemente.
Mr. DOB es, además, un conjunto de ideas e imágenes estratégicamente diseñadas que pueden pasar desapercibidas en un primer momento. La cultura occidental americana cobra gran importancia gracias a esas dos grandes orejas, como las de Mickey Mouse, y sus colores rojo, blanco y azul hacen referencia a la bandera estadounidense. Un par de ojos grandes como los que habitualmente nos encontramos en la ilustración japonesa, completan este personaje que relaciona los Estados Unidos con Japón. Mr. DOB es un concepto que representa la influencia americana sobre la imagen y el diseño nipón, surgido después de la II Guerra Mundial, momento en que la animación americana invade Japón y éstos la reforman creando su propia identidad, lo que hoy conocemos como “anime”.
Una obra interesante a destacar en la que podemos apreciar lo dicho anteriormente con más claridad es la serie 727. En ella Mr. DOB aparece con un aspecto amenazador sobre un fondo de estilo Nihonga (pintura tradicional japonesa). Este trabajo representa los miedos y el escepticismo de Takashi Murakami por el colonialismo y la influencia exterior excesiva, que podrían hacer mella en la ancestral cultura japonesa. El contraste entre la profundidad y la complejidad del Nihonga con la simplicidad y los colores planos de esta figura del “superflat”, no hacen sino enfatizar la contraposición existente entre lo superficial y banal del consumismo actual y las múltiples capas de un trasfondo cultural, rico en texturas y tonalidades.
Mr. DOB tiene su transformación última en Chaos, un ser mutante que forma parte de una dramaturgia en la que el fin último de la existencia es la destrucción y el desorden. Takashi Murakami, nacido en 1962, creció en una época en la que la televisión japonesa se alimentaba de series de ficción que destruían Tokio y ésta se plagaba de monstruos y seres que dominaban la tierra y sembraban el terror. Era como si la sociedad japonesa repitiera constantemente el caos sufrido tras la II Guerra Mundial, como si quisieran poner de nuevo al espectador en una situación parecida. Para Murakami, este deseo de destruir y ser destruido queda representado en Chaos.
En resumen, Mr. DOB es un recurso que Murakami utiliza en multitud de ocasiones y que cobra distintos significados según el contexto. Eso sí, siempre podremos conocer un poquito mejor la personalidad de Takashi Murakami gracias a este personaje de grandes orejas, sólo hace falta mirar más allá su propia imagen.
